La Música de Sergio

viernes, 25 de marzo de 2011

Prefiero tu mirada *



Este jueves no voy a crear un relato. Voy a relatar (tranqüilo, José, relatar, no delatar).

Mi acceso a la comunicación por internet empezó abriendo mi cuenta en hotmail. Así, entré en el mundo de los correos electrónicos,que me ha llevado a considerar el número de correos sin leer como indicador de popularidad. El de correos totales es un indicador a largo plazo, el de los recibidos en el día, a corto.

Luego descubrí los espacios de Windows Live y empecé a publicar artículos de opinión sobre cualquier asunto
del que me apeteciera tratar, sexo, religión, política, la incidencia del precio del pimiento en el IPC, el pueblo saharaui, o cosas de uno en el día a día
http://rroscachapa.spaces.live.com ... Ahí traspasé el listón: de pronto uno tiene amigos virtuales, lógico, se van leyendo otros espacios, otros leen el propio y ahí va surgiendo esa amistad virtual

Soy un decidido defensor de las conversaciones cara a cara. Como hablar cara a cara, mirada con mirada, corazones de los interlocutores abiertos, no hay nada en el mundo mejor creo, que compartir esos momentos con otro ser humano.

Sin embargo no es muy fácil conseguirlo, menos en la vida a la que nos vemos abocados. La conversación directa tiene muchos factores, que pueden unir pero también distorsionar como la comunicación sensorial, el lenguaje no verbal o nuestra propia actitud.

En cambio, escribiendo a “yo que se quien” nos abrimos, nos dirigimos a un ser posiblemente idealizado, que, como no nos conoce, no nos puede hacer daño. Nos abrimos más fácilmente y ello aunque resulte que esa mujer de aproximadamente tu misma edad, con esa flor como foto y esa sensibilidad tan especial tal vez sea en realidad un estibador del puerto de la luz de Las Palmas o de muelle norte de Santa Cruz.

Lo extraño es vivir en una sociedad en la que intimamos con personas a las que no conocemos cuando a penas tenemos una relación de hola y adiós con quien vive en la puerta de al lado de la nuestra, a mi nuevo vecino y vecina de hace seis meses lo he visto tres veces. Absurdo, pero real.

En mi caso, incluso no conozco ni físicamente a quienes algunas noches escucho gemir o algunas mañanas tirar de la cadena, bueno a algunos si, a los de arriba jeje.

Esa es mi reflexión. Mi pregunta es si esto es sano o correcto, que la comunicación escrita vía internet suplemente las carencias de la incomunicación real, que incluso pueda ser tan importante una relación escrita como una presencial, ese abrir el chat del facebook, de gmail o messegerr y decir, hola, como estas-bien , y tu? Bien bien...

Sobre lo que son en sí redes sociales, abrí perfiles en varias de ellas. Sólo mantengo operativo el perfil en facebook, porque creo estar allí es como aparecer el la guía telefónica. Lo que me parece es que facebook se me esta volviendo también raro. Estar ahí, recibiendo regalos, besos, galletitas, bombones o
cervezas virtuales. ¿Para que me vale una cerveza virtual? ¿Para cultivar mi tripa cervecera sin disfrutar? Y hablo de cervezas por no hablar de besos o de abrazos, ¿eh?

Hasta ahora siempre he usado en mis cuentas de correo y en perfiles de redes sociales mi propio nombre. Sí que hice un intento de abrir un perfil de facebook llamado Steve Urkel , en un intento de pasar el rato sanamente con los de más sin hacer daño a nadie, pero no pude/supe o, en síntesis, conseguí hacerlo unos meses y por algún lado estará ese perfil que me olvide hasta la clave de el.

Un abrazo virtual de jueveros (y no jueveros) que me leáis que no se ni quienes son y esto ya va para cerca de 9.000 visitas y que cada noche me gusta más pasar por aquí y desparramar algunas palabras para poder descansar mejor cada noche...

Y todo esto sin conocer vuestro olor, tono de voz, mirada y lenguaje no verbal, dejo claro que me encantará tomar cervezas, ron o bombones hablando cara a cara con cualquiera de ustedes, sin pantalla de cristal por medio.

Buenas noches bichitos... y cambien estas pantallas por miradas reales ;) *

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