Tenemos que ser muy felices con lo que tenemos *

Esta noche prometía.

Lo pensé nada más escuchar Campanas de Vegueta a lo lejos en la guitarra de Chanito, un pescador de dientes grandes y voz ronca, conocido también por Ñito, que captura pescadito como el que ven retratado .

Esconde la guitarra que si no vienen con los primeros compases, fue lo que se me vino a la imaginación, cuando las cuerdas llamaban a la luna grande de Agosto

Con el ruido escapamos de nosotros mismos.

Cada vez cuesta más encontrar espacios de sosiego y silencio en los que poder reencontrarnos, quizas tenga un solo lugar, junto a San Juanito y el mar .

No reivindico la hiperestesia ni la fijación maniática que preconizan siempre los que andan obsesionados con cualquier sonido que les recuerde que no están solos en el mundo; pero sí es verdad que convivimos con televisones que jamás se apagan en las casas vecinas, con bocinazos y hasta con nuestras propias palabras vacías de contenido.

Casi siempre hablamos por hablar, para evitar ese silencio que tanto tememos, y desde que entramos en nuestras casas buscamos la manera de escapar de nosotros mismos activando los botones rojos de cualquier aparato que nos distraiga.

Si nos dejaran pensar un rato empezaríamos a cuestionarnos todo el montaje que habitamos a nuestro alrededor.

El silencio sería hoy la gran revolución y la puerta de entrada a una armonía que necesitamos como agua de mayo en un mundo que cada día entendemos menos, o al menos entiendo yo.

Anoche viendo las Noticias de CNN+, Vi como que lo importante que ellos contaban, es que una mallorquina Lourdes Morro,esta desaparecida a causa de la avalancha de lodo que arrasó el enclave turístico de Cachemira de Leh el pasado día 6 Agosto, y donde buscando uno la imformación ( que no sale en las Noticias Españolas,ni en esa tele anoche) la verdadera noticia seria que ocurrio una gran desgracia, y que han encontrado 165 cadáveres de personas, pero parece que esto no es importante para informar para los periodistas ESPAÑOLES, si no que desaparecio una de ellos, no el resto que no son seres humanos por ser de la India,pakistan o donde sean.

Y es que solemos andar desorientados hasta que nos cruzamos con una muerte cercana o una ´persona desaparecida, o hasta que la salud nos recuerda nuestra vulnerabilidad y lo poco que realmente duramos en este juego.

Prometemos cambiar, vivir más intensamente cada momento y hacer lo que nos dicte el corazón, pero siempre termina llegando la mañana con sus cuentas pendientes y todas esas ocupaciones que no admiten demora.

Claudicamos a una gripe A que no exisitio, y así me lo repetia más de una vez, mi buen amigo Aristides Moreno, nada más llegar en aquellos días de Mexico. Sergio esto es un engaño, una ciudad de 8 millones de habitantes y solo 4 muertos... que no olvidate de la Gripe A, eso no existe , es un invento de los laboratorios para sacar dinero.

Y así fue.

Y en nuestro día a día, es que olvidamos a todos esos muertos que se fueron con lo puesto y que ya no son más que olvido.

Desde que nos dejan nos instalamos de nuevo en esa inmortalidad idiota que nos hace creer que tenemos todos los días de la eternidad por delante.

Vamos demorando proyectos, dejamos que los amores se nos mueran por falta de cuidados y de palabras que los salven,o no empezar uno por el miedo al que pasara, aparcamos vocaciones y negociamos nuevos créditos para acceder a caprichos que al final no nos dan absolutamente nada.

Un buen día te vas, de repente, casi siempre sin que nadie te avise, como has visto que se han ido tantos en los años que llevas en el planeta.

Tú no vas a ser una excepción. No te digo que te escapes al barranco de Los Cernícalos a vivir como un anacoreta, tampoco tienes que salir disparado para el Tibet ni acudir a darte un baño purificador a ningún Ganges.

Todos los cambios están al alcance de tu mano.

Empiezan en el silencio y en el reconocimiento de todo aquello que debes cuidar para no extraviarte.

Como bien escribrí esta tarde en el muro del Facebook ," los buenos momentos dependen de ti mismo".

También el disfrute de la compañía que más te agrada, las puestas de sol que ni siquiera miras cuando regresas derrotado a casa o el mar que se derrama cada día como una metáfora vitalista y cambiante a la orilla de tu propia mirada.

Eso lo hablaba a todas horas con un amigo que hace unos días desapareció para siempre, y cierto es que las noticias de la televisión no ayuda a nada a vivir mejor, Te cuentan lo que ellos quieren, no lo que tu quieres saber realmente.

Hoy necesito mantener a salvo esos propósitos para saber que efectivamente estoy viviendo,que tu existes y que alguna vez, nos comeremos juntos un pescadito de los de Ñito .

Buenas y calurosas noches, Bichitos *