martes, 18 de mayo de 2010
El tablon de Corcho *
Perdónenme, estoy en un cambio de vida y mi habilidad y mi agilidad mental ya no son las mismas de antaño, la edad tan poco perdona; que no es que haya sido nunca el mejor de los memorizadores, tengo cierta aversión al aprendizaje hueco y rollero en plan loro,ya me se tres chistes de loros por cierto, jeje, pero sí es verdad que cuando era más joven, años A -y tenía menos preocupaciones, sobre todo-, además de estudiar podía hacer varias cosas más a la vez, como trabajar , salir de fiesta y memorizar muchísimos teléfonos.
Ahora me cuesta un pooooooooco más... Pero el gusto por saber, ése si que se mantiene intacto. Y es una sensación muy agradable, que espero no perder nunca, aunque me miren mal por tener varios libros abiertos o periódicos a todas horas, más el portátil.
(...)
Hay dos cosas básicas en mis amaneceres: ducharme y tomar un vaso de leche con Cola-cao. Ya sé que suena poco glamouroso pero la verdad es que después de eso, ya se me puede pedir cualquier cosa. O casi cualquiera... Bueno tampoco mucho no pasada las Diez de la mañana.
Hace años, cuando vivía en otra casa por la laguna y mientras desayunaba , miraba la pizarra de corcho que tenía colgada en la cocina. Era de esos de toda la vida: marroncita, blanda y grande, la más grande que encontré en la tienda de IKEA. Y miraba mi corcho porque creo que es uno de los espacios más especiales y más personales que tenía en mi casa.
Era como un espejo, como un baúl, como un diario.
Una especie de resúmen de momentos significativos de mi vida, aunque siempre está vivo, siempre cambiaba.
Tenía fotos, dedicatorias, letras de canciones, más fotos.
Tenía el árbol de la vida, dinámicas de karranza, una flor seca. más Fotos.
Tenía recetas que hace mucho que nadie hace,el abc del reciclaje, la historia de las galletas, y entradas de conciertos, y de pub y disco de la época, más de una ya con el paso del tiempo las han visto ustedes, colgadas en mi muro de facebook.
Tenía una lista de sueños,una lista de sentimientos,una lista de listas...
Así que de vez en cuando recuerdo aquel corcho; y recuerdo lo aprendido y anhelo lo que está por venir.
Recuerdo a gente que pasó por mi vida y pienso en quien aún camina junto a mí; recuerdo a quien echo de menos y a quien es parte de los fantasmas de mi pasado...
De vez en cuando, hago limpieza y cambio algunas cosas del corcho; las fotos, las listas, las historias. Renuevo mis recuerdos, mis sentimientos, renuevo mis sueños.
Les invito a que pongan un corcho en alguna pared de su casa; pueden rellenarlo con lo que les sugiera cada momento de la vida.
Pueden dejar parte de los miedos de ustedes, pueden poner ternura y caricias.
También pueden animar a que la gente deje sus impresiones, sus fotos, sus historias, sus recuerdos...
Saben lo que pienso, que todos hemos cambiado ese Tablón de Corcho por esto del facebook.
Aquí colgamos lo mismo que colgábamos en ese Tablón de Corcho de hace años, de nuestra juventud.
Compartid, compartirse. Es bueno para el alma y también para su cuerpo,en facebook o en el viejo tablón de corcho, pero no es lo mismo, antes tus "amigos " venían a tu casa y veían lo que habías hecho, las fotos, las notas,en ese tablón de corcho, ahora no lo ven en ese Tablón de corcho de tu casa lo ven por aquí. Mejor o Peor ?.
Yo mañana vuelvo a comprar y a recuperar mi Tablón de Corcho, y lo voy a poner en mi cocina, esto del Facebook tiene menos intimidad que él y mi tablón de corcho es mi intimidad y la de mis amigos.
Buenas noches bichitos, y como dice mi amigo Aristides, hasta el infinito y más allá *
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.